
Horl es una marca alemana fundada por un padre y un hijo —Otmar y Timo Horl— que decidieron reinventar la manera de afilar cuchillos en casa. Su producto estrella es un afilador cilíndrico con base magnética que permite mantener el ángulo perfecto sin complicaciones, combinando precisión, diseño y facilidad de uso. La estética minimalista y los materiales de alta calidad (como madera de roble o nogal y discos abrasivos industriales) reflejan el estándar artesanal y funcional de la ingeniería alemana. Con sede en Friburgo, Horl ha conseguido posicionarse como una marca innovadora dentro de un mercado muy tradicional, ganando popularidad tanto entre cocineros aficionados como profesionales que buscan mantener sus cuchillos en perfecto estado sin depender de terceros.
